La decisión de consultar con un vidente o un adivino es personal y depende de cada persona. Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos factores al elegir a un vidente, como la transparencia y la honestidad. Una señal de advertencia es cuando un vidente no muestra su cara o oculta su identidad.
En primer lugar, es importante tener en cuenta que un vidente debe ser transparente y honesto en su trabajo. Si un vidente no muestra su cara, es difícil saber si realmente es quien dice ser. Puede ser una persona diferente a la que aparece en las fotos o videos promocionales, o incluso una persona que no tiene ninguna habilidad especial.
Además, un vidente que no muestra su cara puede tener algo que ocultar, como un historial criminal o un historial de engaño. Es importante investigar a un vidente antes de contratarlo, y si un vidente no está dispuesto a mostrar su cara, es probable que no sea confiable.
En segundo lugar, es importante considerar que un vidente debe ser capaz de proporcionar pruebas de su habilidad. Si un vidente no muestra su cara, es difícil saber si realmente tiene las habilidades que afirma tener. Un vidente que no está dispuesto a mostrar su cara probablemente no estará dispuesto a proporcionar pruebas de su habilidad, lo que hace difícil saber si realmente es capaz de ofrecer un servicio de calidad.
En conclusión, es importante tener en cuenta algunos factores al elegir a un vidente, como la transparencia y la honestidad. Un vidente que no muestra su cara puede tener algo que ocultar, y es probable que no sea confiable. Es importante investigar a un vidente antes de contratarlo y buscar pruebas de su habilidad.